Dominique quizás soñaba con un final del recorrido sereno y una llegada tranquila a Les Sables d’Olonne y nada de esto ocurrirá. El golfo de Vizcaya se mostrará fiel a su reputación típica del mes de febrero y ofrecerá al patrón del Mirabaud un final de vuelta al mundo complicado.
“Esto será la cara norte. Tras una ligera encalmada por el paso del anticiclón de las Azores, el viento rolará y soplará del noroeste, con relativa fuerza, y la travesía del golfo de Vizcaya se presenta glacial y bastante brutal”, comenta Dominique.
El Mirabaud navegará de través y franqueará las últimas millas que lo separan de la línea de llegada a buen ritmo.
Una delegación de representantes del Mirabaud, el patrocinador de Dominique, estará presente para dar la bienvenida al patrón suizo en la población francesa de Les Sables d’Olonne, junto a miembros de la Société Nautique de Genève y su equipo habitual de fieles seguidores.
Si las condiciones lo permiten, todos saldrán a la mar con el fin de seguir los últimos metros de la regata del Mirabaud y de acompañar a su patrón en el momento en que atraviese en canal de Puerto Olona. Las celebraciones se presentan por todo lo alto.